top of page

Tijuaneados Anónimos: Una lágrima, una sonrisa

[2010] En el año 2008, un grupo de ciudadanos se reúnen cada semana a reflexionar sobre una de las peores crisis de violencia e ingobernabilidad que ha vivido Tijuana. Juntos, imaginan la ciudad en la que quieren vivir y el tipo de ciudadanos que quieren ser.


Fachada del lugar donde se reunía el grupo en el centro de la ciudad.


El proyecto comprende: un grupo de autoayuda, un largometraje documental, exhibición en museos y la composición e interpretación de una pieza musical.

Originalmente concebido como un proyecto de arte público,Tijuaneados Anónimos: una lágrima, una sonrisa, es una reflexión colectiva a través de varios medios sobre nuestro papel como ciudadanos, el poder que tenemos y las posibilidades de imaginar juntos cómo mejorar nuestro entorno.

En Tijuana, en 2008, vivimos una de las más terribles crisis de violencia e ingobernabilidad en la historia de la ciudad. Balaceras, asesinatos, secuestros, mala planeación urbana, migración, narcotráfico, eran palabras que escuchábamos todos los días, que veíamos en los titulares de las noticias, que afectaban nuestra vida diaria.



Foto cortesía de Omar Martínez


Por otra parte, veíamos que en los anuncios de venta de automóviles se valoraba mucho que los vehículos no hubieran circulado en Tijuana, que fueran “no tijuaneados”, esta característica se promovía como un plus. Esto significaba que el automóvil no había transitado por las accidentadas calles de la ciudad, que no se había maltratado al caer en sus baches, que la humedad del ambiente no había erosionado su pintura ni el polvo dañado las piezas de su motor.


Sillones abandonados en una calle de Tijuana.


Partiendo de la idea de que una persona, como un carro, se puede “tijuanear”, entendido como la erosión o el desgaste que sufren los objetos y las personas, tanto física, mental y espiritualmente, por habitar en Tijuana, decidimos crear un grupo de autoayuda para recuperarse de este fenómeno.

Basado en los doce pasos de Alcohólicos Anónimos, el grupo de recuperación, estaba ubicado en el centro de la ciudad. Abierto al público, sesionaba tres veces por semana. Contaba con una tribuna en donde los ciudadanos hablaban sobre diferentes temas relacionados con la ciudad, con el fenómeno de lo tijuaneado y con las posibilidades de mejorar como personas para que las cosas a su alrededor mejoraran. Siempre bajo el lema “La ciudad es la suma de todos”.



El grupo de recuperación en una de sus sesiones.


El largometraje documental, (2010) captura fragmentos de las sesiones del grupo y sigue a algunos de sus miembros en la vida cotidiana. Estos personajes y sus acciones dialogan con las voces de otros ciudadanos como: un luchador, un fotoperiodista, una activista, entre otros, que intentan explicar y describir la ciudad que habitan. Tijuaneados Anónimos: Una lágrima, una sonrisa se vuelve una reflexión sobre Tijuana desde las perspectivas de sus habitantes.



El documental fue parte de la selección oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia (2009), y del festival itinerante de documentales AMBULANTE (2010). Obtuvo el premio “Mejor Producción Local” en el San Diego Film Festival. De igual forma, lo presentamos en escuelas, centros culturales y centros comunitarios en México y Estados Unidos. Las sesiones de preguntas y respuestas posteriores al documental se volvían una sesión abierta de Tijuaneados Anónimos en donde los presentes reflexionábamos sobre los lugares que habitamos y la posibilidad que tenemos de mejorarlos.




El corrido del ciudadano


La música original del documental fue compuesta por el grupo de rock alternativo Little White Teeth, de San Diego, Estados Unidos. La película también incluye “El corrido del ciudadano” compuesto a partir de citas de los mismos personajes e interpretado por el grupo tijuanense “Herencia Norteña” que luego fue adaptado al estilo musical rockabilly por Hell Dandys y cumbia por Koñorteño.




También hicimos una recreación del espacio físico de Tijuaneados Anónimos en museos y galerías. El objetivo era invitar a los visitantes a reflexionar sobre los lugares que habitan y la posibilidad de juntos imaginar cómo transformarlos. Una réplica del grupo formó parte de la exhibición “Inside the Wave” en San Diego Museum of Art.

Réplica de Tijuaneados Anónimos en el San Diego Museum of Art.


Esta instalación fue parte de la exhibición "Inside the wave".


La frase del título “Una lágrima, una sonrisa” hace referencia a los dos aspectos de la ciudad: uno de destrucción, indiferencia, abandono y otro aspecto de esperanza y vida, que lucha por florecer pese a los obstáculos.

Comments


bottom of page